Narraciones invisibles

“Las cosas que se ven son el aspecto visible de aquellas que no se ven” (Anaxágoras)       

“Lo esencial es invisible a los ojos” (Antoine de Saint- Exupéry).

Narraciones invisibles no es el registro de un momento, sino una reflexión sobre las formas y las historias que nos cuentan, un intento de captar nuevas realidades residentes en la intuición y en la imaginación, en lo que trasciende a la propia imagen revelada. Son esos lugares donde vive lo inexplicable, lo asombroso, lo misterioso, donde la realidad pasa por las emociones antes que por la racionalidad de lo consciente. Así pues, intento que mis imágenes sean una incógnita en su propia realidad. Registro lo que no veo, documento lo que quisiera ver. Para ello parto de la abstracción, como forma de expresión más mística donde el valor  intrínseco de la imagen sobrepasa el mundo visible y en segundo lugar, recurro al poder de evocación del blanco y negro (luz y oscuridad) frente al impacto del color con el fin de reflejar el contraste entre lo oscuro (la incomprensión de la realidad) y la luz (la verdad). Son imágenes ambiguas que cobran vida si las observamos detenidamente y dialogan entre ellas  para convertirse en narraciones  silenciosas de las  inquietudes  que preocupan  al ser humano: el amor, el deseo, la muerte, el sexo, el miedo, la duda, el devenir del tiempo, la nostalgia, la decepción, la alegría… y un largo etcétera. Las pistas están dadas, ahora somos nosotros los invitados a redactar y dar visibilidad a lo invisible.